El metanol es un alcohol que se ha utilizado tradicionalmente en la formulación de lavaparabrisas, ya que contribuye a una limpieza al mismo tiempo que reduce el punto de congelación de la solución limpiadora. Sin embargo, el 9 de mayo de 2019 entrará en vigor una nueva normativa europea (Reglamento (UE) 2018/589) que prohíbe la comercialización de líquidos lavaparabrisas con metanol en una concentración igual o superior al 0,6% en peso.
Adelantándose a las exigencias de esta normativa, desde principios de 2019 Krafft ya no fabrica ningún lavaparabrisas con metanol, sustituyendo este compuesto químico por otros alcoholes permitidos en la formulación de lavaparabrisas.
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Así, la gama de lavaparabrisas de Krafft incluye un lavaparabrisas tradicional, un lavaparabrisas desengrasante que aguanta temperaturas de hasta -6°C, un lavaparabrisas con tratamiento anti-lluvia Rain-X que aguanta temperaturas de hasta -5°C y, para condiciones climatológicas más extremas, un lavaparabrisas con tratamiento anti lluvia que aguanta temperaturas de hasta -20°C, una novedad muy demandada que se ha incorporado al catálogo recientemente.
Todos los lavaparabrisas de Krafft se caracterizan por proporcionar un excelente poder de limpieza frente a manchas de barro, mosquitos, grasa, etc. además de tener una fragancia muy fresca y agradable. Los que incorporan, además, el tratamiento anti lluvia, proporcionan una evidentemente mayor visibilidad en condiciones de lluvia, nieve o granizo… una característica excepcional que, una vez probada, nadie renuncia a ella.
