¿Cómo conducir seguro bajo la lluvia?
Tras uno de los veranos más cálidos y secos que se recuerden en España, vuelve septiembre y vuelven las lluvias. La lluvia es uno de los enemigos más comunes y poderosos que podemos encontrar si queremos disfrutar de una conducción segura. Y es que la lluvia puede ayudar a causar dos importantes problemas cuyas consecuencias pueden ser fatales para los conductores y sus acompañantes.
El primero de los problemas es la reducción de la adherencia entre la rueda y el pavimento, esto va a redundar en perdida de tracción, capacidad de frenado y empeoramiento del giro del vehículo. Sí la perdida de adherencia es lo suficientemente grande, el vehículo puede sufrir un fenómeno conocido como aquaplaning. Dicho fenómeno se produce cuando las ruedas no son capaces de evacuar toda el agua presente sobre el asfalto, ocasionado una pérdida total de contacto entre las ruedas y la carretera provocando qué el coche se deslice flotando sobre el pavimento.
Para evitar la pérdida de adherencia en situaciones de lluvia y evitar el aquaplaning se recomienda revisar el estado de los neumáticos y sustituirlos con previsión, disminuir la velocidad de conducción, aumentar la distancia de seguridad con el vehículo precedente y realizar una conducción más suave.
El segundo de los problemas que podemos experimentar en situaciones de lluvia es una disminución considerable de la visibilidad debido a qué las escobillas limpiaparabrisas no son capaces de evacuar toda el agua de lluvia que cae copiosamente sobre nuestros parabrisas. Es por ello, que para aumentar la visibilidad desde Krafft se recomienda el uso de su limpiaparabrisas con tecnología RainX. RainX es el mayor fabricante de productos antilluvia para la automoción del mundo, su exclusiva formulación basada en tensioactivos es capaz de modificar la forma de la gota de agua sobre nuestro parabrisas, consiguiendo así, gotas de agua más redondas y con una mayor superficie de contacto con el aire de la carretera. Esto provoca que a velocidades superiores a 75 km/h, las gotas de agua se deslicen automáticamente sobre el cristal del parabrisas aumentando la visibilidad hasta un 60% más respecto al simple uso de las escobillas limpiaparabrisas.
Para una aplicación más sencilla del RainX, Krafft incorpora su exclusiva tecnología en una garrafa de limpiaparabrisas, de manera qué para conseguir el efecto repelente de RainX, basta con llenar el depósito de lavaparabrisas y accionar el lavado de parabrisas de nuestro vehículo. El aditivo RainX quedará entonces automáticamente distribuido en forma de una fina capa a lo largo del parabrisas, esta capa no será perceptible por el conductor.
Imagen 3. Lavaparabrisas Krafft con tecnología antilluvia RainX
Además, los lavaparabrisas Krafft son formulados libres de metanol para cumplir con la normativa UE 2018/589 que regula el uso de este metanol al 0,6% como máximo, a la par que cumple con los estándares de protección contra la congelación ASTM D1177.
